Aplicaciones que cambiaron la forma en que usamos Internet

Hace 20 años atrás se pensaba que las notebooks iban a ser el futuro, que todo el mundo tendría una, y que ya no habría necesidad para la computadora de escritorio o PC. Una década atrás, las tablets y blackberry dominaban el mercado y parecían ser el futuro de las comunicaciones, y por supuesto Internet. Pero eventualmente terminó surgiendo el verdadero ganador de estas disputas, el Smartphone.

Es por eso que en la actualidad la mayoría de los programadores están trabajando en el desarrollo de nuevas aplicaciones para teléfonos, ya que sin lugar a dudas el Smartphone ocupa un puesto indiscutido entre los dispositivos más usados del mundo, seguido por las tablets y luego las notebooks.

Si bien en el pasado, el desarrollo y mantenimiento de los sitios webs era clave, hoy en día el diseño de los sitios está pensado y extensamente probado para teléfonos celulares. De esta forma, la mayoría de los usuarios actuales consumen información, consultan el estado de su banco y otros servicios a través del teléfono, utilizando la PC o notebook sólo para trabajo u otras tareas más pesadas.

Uno de los puntos fuertes de las aplicaciones móviles en ventaja de los sitios convencionales, es que la mayoría de la información necesaria para cargar lo que estamos buscando ya está en la memoria del dispositivo, mientras que en un sitio web convencional (sobre todo si somos precavidos y borramos el cache), tendrá que cargarlo cada vez que intentemos acceder. Lo que resulta muy engorroso y costoso, sobre todo si navegamos por fuera de una señal de Wi-Fi.

Mundo de posibilidades

Ya sea por la creación de un juego u otras aplicaciones de entretenimiento, como reproductores de series y películas hasta aplicaciones de cocina, la cantidad de opciones para crear un programa móvil es infinita. Quizás por esta razón se abrieron las carreras de diseño de aplicaciones móviles y cada vez más programadores se están volcando a esta tendencia.

Esta tecnología abre las puertas para facilitar cuestiones que solían ser engorrosas como pedir un taxi hasta pedir comida en unos simples clicks. Las opciones no se detienen ahí, existen programas climáticos que emiten alertas sonoras ante tormentas fuertes y otros eventos que pueden ponernos en riesgo.

En cierta forma la aparición de las nuevas pantallas, más grandes que las convencionales, tuvo mucho que ver con la creación de las nuevas aplicaciones. Es que por ejemplo, en una pantalla de Blackberry hubiese sido imposible ver el estado del tráfico de forma eficiente. Además, la falta de interactividad entre un teléfono con teclado y un Smartphone es abismal. Hoy el click es un golpe de un dedo en la pantalla, eso abre puertas que permanecían cerradas para los desarrolladores.

En cierta forma, es uno de los grandes aciertos de Steve Jobs, que a través de su creación más famosa, el iPhone, logró revolucionar el mercado con un dispositivo capaz de realizar funciones inusitadas hasta el momento. El futuro de las aplicaciones se centra en resguardar la privacidad y seguridad, permitiendo que el teléfono se convierta en una suerte de billetera virtual, algo que en los países de primer mundo está funcionando bien y pronto llegará a toda América Latina.