Video: Cómo sería la vida si siguiera el ritmo de nuestra conexión a Internet
Quizás no conozcas el término Lag, pero con seguridad conoces todos sus efectos. El Lag es el término que se usa para definir al retraso producido en una comunicación. Todos hemos sufrido en miles de ocasiones la lentitud de Internet, sin importar lo que prometan los proveedores. Aprovechando esas experiencias, una empresa sueca decidió promocionar su servicio de fibra óptica mostrándonos cómo sería nuestra vida cotidiana bajo los efectos del lag.
La lentitud de Internet puede provocar ira, decepción y hasta tristeza en millones de usuarios; a nadie le gusta le gusta pasar minutos enteros delante de la pantalla esperando una respuesta de la red o perder partidas enteras de juegos online gracias al lag. Y como todos conocemos esa sensación, la empresa sueca Ume.net decidió utilizarla para promocionar su servicio de fibra óptica.
¿Cómo sería el lag en la vida real? ¿Imaginas levantarte, cambiarte, preparar algo de comer, limpiar tu casa o trabajar con algunos segundos de demora entre lo que ves y lo que realmente pasa? Ume.net lo muestra en un divertido video, en el que, con la ayuda de cuatro voluntarios y un casco Oculus Rift, podemos observar qué podría pasar en cada una de estas situaciones.
El proyecto se denomina Living with Lag y nos muestra cómo acciones básicas se vuelven casi imposibles de realizar. Los voluntarios que participaron de la experiencia sufrieron dos niveles de latencia, uno a 333 milisegundos, y el otro a tres segundos. También se enfrentaron a otro problema como es la carga del búfer, que provocaba micro-cortes en la red.
Ume.net ofrece un servicio de fibra óptica con una velocidad máxima de un gigabit por segundo, algo que muchos de nosotros compraríamos sin pensarlo. Sin embargo, la realidad es que estamos lejos de disfrutar de esa velocidad en nuestras conexiones, aunque los especialistas son optimistas, ya que en pruebas experimentales científicos norteamericanos lograron una velocidad de conexión de 339 gbps y durante el año pasado, investigadores del Reino Unido desarrollaron la conexión a internet más rápida del mundo con fibra óptica convencional.
